"‎LOS PUEBLOS, LOS HOMBRES SE ENFRÍAN POR AUSENCIA DE ESPÍRITU. PERO ESTAMOS NOSOTROS, CON PEDERNAL Y YESCA, CON MELODÍAS Y CANTARES, POEMAS Y REFLEXIONES , ALTO DESVELO Y SUEÑOS DE TODO TIPO, PARA ENTIBIAR LAS HORAS DE AQUELLOS QUE NO QUIEREN CONGELARSE."
-Atahualpa Yupanqui-

desde "LA CANCIÓN VERDADERA" un libro de Victor Heredia

"...A. Yupanqui nunca cedió un palmo ante el avance de artistas que desde la mediocridad hicieron tanto daño a la cultura como el éxito económico que obtuvieron, preservó con hidalguía su forma y honró los contenidos. La canción popular también se ha fortalecido desde su verdad y vence la propia añoranza y el embate de los medios que la ignoran. No le quita el sueño resistir, ella sigue alumbrando el camino día a día en cuanta reunión de jóvenes reverbera una guitarra..."



lunes

"LA SHALAKA " CHACARERA

FOTO: FERNANDO OCHOA, MARTHA DE LOS RÍOS,
ABEL FLEURI Y ARGENTINO VALLE

M.Gómez Carrillo
MARTA DE LOS RIOS (CANTANTE)
Martha de los Rios, nombre artístico de Marta Inés Gutiérrez de Vargas (1906-1995), fue una destacada cantante de música folklórica de Argentina. Ha sido considerada una de las cinco más importantes cantantes de la historia de la música folklórica de Argentina, junto a Mercedes Sosa, Marián Farías Gómez, Suma Paz y Ramona Galarza. Fue la madre del músico Waldo de los Ríos.
Se inició en 1931 como cantante de tango, pero luego se dedicó a la música folklórica de Argentina. Se presentó con el grupo Los Trovadores, con el que alcanzó una gran difusión por toda América Latina. En la década de 1950 cantó acompañada por su hijo Waldo de los Ríos. Entre las canciones que interpretó se recuerdan especialmente Llorando estoy, Huachitorito y La Shalaca.

Cuando canto chacareras
me dan ganas de llorar
porque se me representa
el martes de carnaval

Cuatro calles he corrido
cinco con el callejón
para ver la morenita
que me roba el corazón

YO no sé que le dijera
que le convenga mejor,
le diré que es una rosa
del jardín de mi ilusión

Estribillo

Señores soy santiagueño
yo no niego mi cantar
en la copa del sombrero
traigo mistol y chañar

El árbol para el invierno
todas las hojas derrama
así se acaban los gustos
de la noche a la mañana

Dices que me quieres mucho
yo te quiero mucho más,
pesaremos en balanza
cuál amor pesará más

El viborón en el verde
y en el campo no aparece
la mujer engañadora
doscientos palos merece.


1 comentario: