"‎LOS PUEBLOS, LOS HOMBRES SE ENFRÍAN POR AUSENCIA DE ESPÍRITU. PERO ESTAMOS NOSOTROS, CON PEDERNAL Y YESCA, CON MELODÍAS Y CANTARES, POEMAS Y REFLEXIONES , ALTO DESVELO Y SUEÑOS DE TODO TIPO, PARA ENTIBIAR LAS HORAS DE AQUELLOS QUE NO QUIEREN CONGELARSE."
-Atahualpa Yupanqui-

desde "LA CANCIÓN VERDADERA" un libro de Victor Heredia

"...A. Yupanqui nunca cedió un palmo ante el avance de artistas que desde la mediocridad hicieron tanto daño a la cultura como el éxito económico que obtuvieron, preservó con hidalguía su forma y honró los contenidos. La canción popular también se ha fortalecido desde su verdad y vence la propia añoranza y el embate de los medios que la ignoran. No le quita el sueño resistir, ella sigue alumbrando el camino día a día en cuanta reunión de jóvenes reverbera una guitarra..."



martes

"NOCTURNO A MI BARRIO" ANIBAL TROILO

FOTO: ANIBAL TROILO "PICHUCO"
LETRA Y MÚSICA: ANIBAL TROILO

Mi barrio era así, así, así...
Es decir ¿¡qué sé yo si era así!?
¡Pero yo me lo acuerdo así!,
con Giacumin, el carbuña de la esquina,
que tenía las hornallas llenas de hollín,
y que jugó siempre de "jas" izquierdo al lado mío,
siempre, …siempre,
tal vez pa'estar más cerca de mi corazón!

Alguien dijo una vez
que yo me fuí de mi barrio,
¿Cuando? …¿¡Pero cuando!?
¡Si siempre estoy llegando!
y si una vez me olvidé,
las estrellas de la esquina de la casa de mi vieja
titilando como si fueran manos amigas,
me dijeron: gordo, gordo, quedáte aquí...
quedáte aquí...


"LOS PÁJAROS PERDIDOS" CANCIÓN

FOTO: MARIO TREJO
1973 - MÚSICA: ASTOR PIAZZOLLA
LETRA: MARIO TREJO
Mario César Trejo nació el 13 de enero de 1926, no obstante existe desacuerdo sobre su ciudad natal, algunas fuentes indican Buenos Aires[1] o La Plata;[2] sin embargo, Jorge Ariel Madrazo al prologar el poema Orgasmo (Centro Editor de América Latina,1989) menciona que "Mario Trejo asegura, alternativamente, haber nacido en Tierra del Fuego, en Comodoro Rivadavia, o en muchos otros lugares: todo indica que ello ocurrió al sur del país, no aclara en qué año (Trejo coincide con Marcel Duchamp en que tales precisiones "sólo sirven a los tontos y a los profesores de literatura española")."[3] [4] Ha colaborado en varias revistas literarias argentinas como Contemporánea (1949), Luz y sombra (1948), Cinedrama (creada por él,1953), Ciclo, Conjugación de Buenos Aires.


Amo los pájaros perdidos
que vuelven desde el más alla,
a confundirse con un cielo
que nunca más podre recuperar.

Vuelven de nuevo los recuerdos,
las horas jóvenes que di
y desde el mar llega un fantasma
hecho de cosas que amé y perdí.

Todo fue un sueño, un sueño que perdimos,
como perdimos los pájaros y el mar,
un sueño breve y antiguo como el tiempo
que los espejos no pueden reflejar.
Después busqué perderte en tantas otras
y aquella otra y todas eras vos;
por fin logré reconocer cuando un adiós es un adiós,
la soledad me devoró y fuimos dos.

Vuelven los pájaros nocturnos
que vuelan ciegos sobre el mar,
la noche entera es un espejo
que me devuelve tu soledad.

Soy sólo un pájaro perdido
que vuelve desde el más allá
a confundirse con un cielo
que nunca más podré recuperar.


POEMA DEDICADO A HILARIO CUADROS

FOTO: HILARIO CUADROS
Cuadros nación en Guaymallén, Mendoza, un 23 de diciembre de 1902. Su padre era chileno, por ello el apodo de “chilenito” que tenía desde muy joven. Aprendió guitarra con su madre y tía y comenzó cantando a dos voces con su hermano Guillermo.
Hacia 1926 ya era bien conocido como bailarín de cuecas, cantor y compositor. Integró tríos con Domingo Morales y Alberto Quini y luego con Edmundo Cartos y Roberto Puccio. Formo el conjunto Guaymallén.
diario que ha oído las mejores cuecas y tonadas del dúo Cuadros-Morales, agregando que son verdaderos trovadores de Cuyo. De ahí les quedó el nombre que Hilario Cuadros llevaría ya para siempre con su conjunto: 'Trovadores de Cuyo'.

POEMA DE ATAHUALPA YUPANQUI

Se ha cortado el bordón de tu guitarra
cuando la paz del alma florecía.
Cuando muere un cantor, la tierra mía
una canción junto al dolor amarra.

Sombras de Guaymallén anochecidas,
en las acequias su dolor sollozan,
mientras nombran los criollos de Mendoza
al que pasó cantando por la vida.

Le dictaba la Patria cada verso
con la palabra simple del labriego.
Por Cuyo fue su brindis y su ruego,
y la nostalgia azul de su universo.

Adiós, Hilario Cuadros,
compañero de guitarra, y tonada y luna llena.
¡Qué pequeño consuelo y cuánta pena
ha de tener la voz de los troveros!

Se ha cortado el bordón de tu guitarra
cuando la paz del alma florecía.
Cuando muere un cantor, la tierra mía
una canción junto al dolor amarra.